BRADBURY
Ahora es equinoccio en nuestros sistemas,
es la migración del esquimal que nos agrieta los pies,
el conjuro que nunca fue pronunciado.
Ahora el corto circuito cobra dimensión de nube de tormenta,
ya la larva emergió y entre los músculos empuja por salir.
Las noches se hacen cortas y replican un
continuo amanecer que hace de las arterias
la mezcla que se agota.
Secos hasta la medula los clones firman el
suelo que los sustenta para que el convenio
de odio que los aleja y congrega les de destino.
Fractales con conciencia de ave aprietan las
quijadas para que las palabras que los
harán presentes no ocurran antes del impacto.
Desquiciada erosión de los sentidos en el reino ACIDO,
sur de este norte con sabor a cal,
a presencia calcárea, a embrujo hídrico,
a este embrión que se repite pidiendo pista.
Post mortem, pro-fuga, insanidad de bestia,
de presa, de esta identidad que la corteza
torno madero en llamas, conflagración de articulaciones,
de esta sed que se asemeja al óleo.